28 de julio de 2020

Hay dinero para lo que quieren

Mientras tenemos dudas de si al final cobraremos el 2% de incremento que aprobó el año pasado el gobierno de España y, que todavía no hemos percibido y, por supuesto, el PAC de este año, mientras, se rumorean futuros recortes, el DOGV de 20 de julio, nos sorprende con el importe destinado a subvenciones de los sindicatos.
El citado DOGV publica la relación de subvenciones según representación obtenida por los distintos sindicatos en la Comunidad Valenciana y que asciende a más de 3 millones de euros.(adjuntamos enlace)


https://docs.google.com/viewer?a=v&pid=sites&srcid=ZGVmYXVsdGRvbWFpbnxkb2N1bWVudG9zc3RhanZ8Z3g6NmIzOTVhMmVmY2FhZjI3Yg

A estas subvenciones, hay que añadir las que se obtienen de otras administraciones y por otros conceptos, entre ellos la formación, que como ya dijimos en un artículo anterior, son una forma reglada de financiación, ya que el 10% de las subvenciones de cada acción formativa suele ser destinada al capítulo de gastos de difícil justificación; sin entrar a valorar otras cuestiones, como por ejemplo, la oferta de cursos puntuables en la última convocatoria de bolsa de trabajo que tanto escándalo ha provocado, dentro y fuera de nuestra Comunidad.

Desde los primeros recorte salariales y de derechos que hemos sufrido, STAJ ha renunciado, reiteradamente, a este tipo de subvenciones, dando prioridad, al salario y condiciones de trabajo de todos vosotros.

Además, resulta cuanto menos cuestionable, que en la actualidad, con el COVID causando estragos personales y económicos, en el que no tenemos seguro el incremento del 2% ni el incremento en la trayectoria profesional (a pesar de que el personal del Consell, sí percibirá lo que acordaron en la Mesa General, tanto titulares como interinos), en el que los recortes suenan cada vez con más fuerza, la administración se dedique a repartir dinero entre quienes deben plantar le cara para  defender a los funcionarios y sus derechos.

STAJ rechaza, tajantemente, que los sindicatos se financien con cargo a los presupuestos de nuestro empresario. Máxime, porque luego llegará éste con las rebajas y no lo pagarán ellos, sino todos y cada una de las personas que constituye el colectivo de funcionarios judiciales.

Es perfectamente viable que un sindicato subsista, únicamente, con las cuotas de sus afiliados, tal como llevamos demostrando en STAJ desde hace años. No queremos recibir dinero de una administración que es y será nuestra adversaria en las mesas de negociación, porque preferimos tener siempre las manos libres para enfrentarnos a ella con toda la contundencia que haga falta en la defensa de los derechos de nuestro colectivo.