10 de enero de 2022

De interinos, refuerzos, y otras cuestiones no menos importantes


A día de hoy, como viene siendo habitual con esta administración, todavía no sabemos que refuerzos se han concedido y cuales no se han renovado, ni los motivos del porque unos sí y otros no, porque al fin y al cabo las únicas noticias que tenemos son de los propios interesados, que nos han venido a decir lo que sospechábamos: que en la mesa sectorial nos volvieron a mentir.

Recordamos, que en la última mesa nos trajeron una propuesta para nombrar refuerzos en los SCAG, con un objetivo desconocido, toda vez que debían encajar, o bien negociar con los Secretarios Coordinadores cuál iba a ser su cometido. Por lo que escuchamos por ahí, eso lo saben ya y lo tienen bien guardadito. Esta actitud sin duda debe ser la buena fe que exige el TREBEP en cualquier negociación. Además, en la misma nos aseguraron que se iban a renovar todos los refuerzos, excepto aquellos que estuvieran en función de que en el órgano de destino hubiera un Juez o un Laj de refuerzo, en cuyo caso cesarían como consecuencia del cese de aquél.

Pues bien, esto no ha sido así. Ahora, tenemos refuerzos por un mes, por seis meses y por un año sin explicación de ninguna clase, y al parecer también con independencia de que el Juez o el Laj de refuerzo haya cesado o no. Es decir, nos discuten hasta el último céntimo que nos pagan, de hecho nos han bajado el sueldo a la mayoría este pasado ejercicio, pero no dan explicaciones ni claridad de ninguno de sus movimientos de personal, en los que acabas pensando que algunos refuerzos no tienen otra explicación que el pago de la cuota política gubernamental, según socios, en medio de todo el déficit democrático de la negociación colectiva en la Administración de Justicia.

Pues bien, difícilmente podemos dar el visto bueno, a algo que al parecer se nos oculta deliberadamente, que además a nuestro entender da pie a un despilfarro de difícil explicación, por cuanto hay renovaciones que se hacen sin más explicación de necesidades ni de consecución de objetivos, mientras en otros lugares resulta que se cesa al personal o sencillamente no se nombra, con el mismo criterio, es decir, ninguno. Sólo basta rellenar un papel lleno de excusas en lugar de motivos reales.

Si los nuevos refuerzos han de depender del criterio de los Secretarios Coordinadores y no de la negociación llevada a cabo legalmente en la correspondiente Mesa Sectorial, en un ya clásico abandono de los responsables políticos de donde me gasto el dinero, y van a ser sólo un número determinado de LAJS los que dispongan a donde y cuando se destinan los recursos humanos de refuerzo, visto lo ocurrido hasta el día de la fecha, todavía nos los ponen más difícil porque con ellos no hay negociación posible según la legislación vigente. Y no nos extraña que vaya a ser así, toda vez que así se quitan la responsabilidad de encima en cuanto al gasto, mientras a nosotros se nos recorta el salario, y el LAJ ha empezado su carrera en incrementar su diferencia de retribuciones en 200 euros más a su favor, mientras oímos quejas de que es poco porque tienen más responsabilidades,  por firmar un trabajo que también hacemos además nosotros. Firmar, no hacer, de ahí la verdadera excusa, y no la que esgrimen para no fichar como el resto de los funcionarios.

Recordamos que somos la última CCAA de España en cuanto a retribuciones en la Administración de Justicia. Podemos seguir riéndoles las gracias, pero a nosotros no nos hace ninguna. Así poca negociación habrá, porque el diálogo ya hace tiempo que no existe.