Mientras el paro y las colas en los comedores sociales no dejan de crecer y los comercios y autónomos tienen dificultades para llegar a final de mes, en las negociaciones de los actuales Presupuestos Generales del Estado, el gobierno con el propósito de poder aprobarlos, sea como sea, ha aceptado una enmienda que aumenta en 5 millones de euros los fondos destinados a la organizaciones sindicales. Ello supone un incremento de más del 50% de los 8,8 millones que ya venían percibiendo.
A estas subvenciones, hay que añadir las que publicó recientemente el DOGV de 20 de julio, por el que se repartían las cuantías entre los sindicatos según representación obtenida por los distintos sindicatos en la Comunidad Valenciana y que ascendían a mas de 3 millones de euros.
Hay dinero para lo que quieren
Desde STAJ, seguimos negándonos rotundamente a entrar en este juego y mantenemos nuestra renuncia a las subvenciones.
Queremos seguir teniendo las manos completamente libres para ejercer
nuestra actividad sindical, continuar centrados únicamente en la defensa
del colectivo, y no deberle favores a nadie.
No tenemos enormes sedes o edificios, no los queremos ni los necesitamos. No organizamos
grandes eventos, ni convenciones porque no son necesarios. Tampoco poseemos macroestructuras
formativas, pero damos servicio al afiliado negociando convenios
especiales con otras entidades. Y sobre todo, mantenemos con orgullo
nuestra filosofía de asignar todos nuestros recursos a la defensa en las
mesas de negociación y a la atención directa en los centros de trabajo.
Volvemos a repetir públicamente, con la voz bien alta, que STAJ ha demostrado que es posible que un sindicato subsista solo con las cuotas de sus afiliados, que renuncia a las subvenciones y deja para otros esa más que dudosa actividad.